El peso de la insidia

Domingo Freitas dimite como presidente del Areas por desgaste: "Las pocas enemistades que tengo se deben al fútbol"

"Aquí, en el entrenamiento del primer equipo, pasando frío", responde Domingo Freitas, presidente del Areas, para ubicarse al otro lado del teléfono. Son las once de la noche. Media hora antes el club ha comunicado que el mandatario y sus compañeros de junta presentarán este domingo su dimisión en una asamblea extraordinaria. Una decisión "muy meditada, tomada a conciencia", asegura Freitas, a la vez dispuesto a cumplir con las obligaciones de su mandato hasta el último instante.
Freitas, Mingos en el día a día, nota el desgaste del cargo. Le cuesta detallar las razones de su renuncia. "No son temas económicos ni deportivos". El Cultural Areas ocupa actualmente la décimo séptima posición en Tercera, en la frontera de la salvación. Le queda 16 jornadas por delante para escalar un puesto en teoría y alguno más ante posibles arrastres desde Segunda B. En lo pecuniario, "el club está saneado. Hay dinero en las arcas, aunque no sea mucho". Entiende, en consecuencia, que es una situación propicia para "alguien que quiera trabajar".
Pero no existe un claro aspirante a la sucesión. Nadie, al menos, que se lo haya comentado. Todos sus compañeros de directiva le secundan en el adiós. El Areas dispone de más de 600 socios, todos convocados a esa asamblea en la casa cultura de la parroquia. "Irán pocos", pronostica Freitas. "Suele ser así". Pero no pierde la esperanza de que alguien dé un paso adelante. Formalizada la renuncia, el club ponteareano abrirá un plazo de 21 días para la presentación de candidaturas.
La actual junta ofrece un amplio tiempo de aclimatación a su hipotético relevo. Seguirá al frente de la entidad hasta el final de la temporada. No aplazan a ese día el proceso porque "te metes en mayo o junio, sin margen para construir el nuevo proyecto".
Sin causas graves que expliquen su cansancio, Mingos desliza al fin el dolor que le provoca la inquina de baja intensidad: las críticas deslizadas en rumores, las malas caras, los reproches. "Las pocas enemistades que tengo se deben al fútbol. Muchas veces tienes que tragarte la lengua", asegura el que también es concejal de Ponteareas. "No lo aguanto". En contrapartida, indica que también ha recibido numerosas adhesiones desde que trascendió su voluntad de irse.
Existe otro escenario, quizás probable: que la carrera de la sucesión quede desierta. Freitas anticipa que en ese caso reconsiderará la situación. "Dimito por el bien del Areas, para que las cosas funcionen como se merece el club. Si no se presenta nadie, continuaremos hasta mayo y entonces veremos. Sería una pena dejar que esto se deshaga. Pero si debo continuar, nadie podrá decir que me aferro al sillón".